Y si, aquí hay la fiesta grande en Carnaval, el famoso Carnival de Bonn. Me habían avisado. No me lo creí. Los alemanes no podían ser capaces de montar una buena fiesta según mis teorías. Pero no fue así.
Todo empezó el jueves 16, cuando por la mañana las niñas iban disfrazadas. Muy monas ellas. Fui al kinder a llevar a la mediana, y un "pasillo"de las profes (al más puro estilo fútbol al ganador de la liga) me sorprendió nada más entrar, al grito de ALAAAAAAAAAAAAAAF!!! (para los no metidos en el tema, es el saludo de Carnaval, vamos, un "hola, feliz Carnaval", pero resumido y con poca dificultad. Yo teorizo que lo inventaron para que los abundantes borrachos pudieran desearse un buen carnaval sin necesidad de hablar mucho, ya se sabe, que el alcohol atonta la lengua... ya me callo que me voy del tema).
Siguiendo con lo que decía, casi me da un ataque al corazón con eso, pero ya lo ultimo fue al ver sus disfraces.
Os haré un rápido resumen:
- Dos de ellas vestidas con ropa negra estrecha, que con la edad y el cuerpo que tienen, parecían salchichones embutidos, con una especie de serpiente (made in IKEA) enrollada por el cuerpo. Pelo teñido.
- Otras dos de... digamosle... tipo Regreso al Futuro, pero ochentero. Recordáis esos chandals fosforescentes...? Nada mas que añadir, dejo lugar a vuestra imaginación.
- Dos mas de "Traje tradicional alemán".
- Y una, que la pondremos en el grupo de arriba, pero en un subgrupo, llamado "disfraces de guarrilla" (dicho mal y pronto). Ya sabéis: monja-guarrilla, gata-guarrilla, tigresa-guarrilla, guarrilla-guarrilla... Pues dentro de estos, esa mujer iba de "Traje tradicional alemán-guarrilla". La falda, más que falda era cinturón ancho y se le veian los ligueros. Con lacitos. Rojos. Podéis imaginar que mi cara de "Mujer, tapese uste' que trabaja en un Kinder (y que hace fresquete, no se me vaya a resfriar)" fue épica.
Pues aquí no acabó la cosa. Al llevar a la niña en cuestión a su clase, entro y veo toda una mesa con aperitivos, y unos 10 niños de entre tres y seis años bailando al ritmo de "nossa nossa assim você me mata ai se eu te pego ai ai se eu te pego". Después de ver esto me ha quedado claro que no solo la juventud de España esta de capa caída, y sin frenos.
Eso fue mi primer choque cultural con el carnaval.
Después ya fue todo un seguido de ver gente disfrazada en todos lados y de todas formas (hombre en calzoncillo (rosa brillante, of course), aletas de bucear y alas de mariposa incluido).
Como curiosidad diré que ahora entiendo porque los alemanes aguantan bebiendo toda una tarde y una noche. Se arrean un buen plato de puchero del bueno a las 4 de la tarde, y venga, para dentro que aun cabe más cerveza.
Resumiendo..... me gustó. Lo recomiendo, se lo montan bien estos alemanes.